La exquisita biodiversidad de Chile, nación en formación y territorio por descubrir, atrajo a los primeros naturalistas que llegaron a recorrer y registrar nuestra tierra. Sus viajes responden a un espíritu de aventura y curiosidad, y en sus anotaciones se revelan cruces entre ciencias naturales, sociales y humanidades. Ignacio Domeyko, Claudio Gay y María Graham, por ejemplo, registraron además de flora y fauna, costumbres cotidianas y prácticas de la vida social y política de diversas localidades.
Si bien inicialmente la práctica del ilustrador naturalista venía de la mano con el trabajo de campo, la recolección de especies, y los apuntes in-situ, al día de hoy la aproximación a la naturaleza ha mutado a formas intrínsecamente vinculadas a la tecnología. Internet se instituye como un puente cuando la distancia entre dibujante y objeto es un obstáculo, y las redes sociales son armas fundamentales para difundir la obra de los ilustradores contemporáneos.
Los procesos se adaptan a los nuevos tiempos, y las formas y fines también mutan a los nuevos contextos.
En el escenario de la ciencia, la ilustración continúa vigente como herramienta de divulgación. Parece curioso, pero en esa ejecución perfectamente figurativa hay también un diálogo con la abstracción. La lámina ilustrada permite mostrar un “genérico perfecto”, una versión platónica del espécimen; en oposición a la fotografía que mostraría solo un ejemplar específico y todas las particularidades e imperfecciones de su individualidad.
Si bien el grueso de la disciplina continúa fusionando arte y naturaleza en un lenguaje visual específico, caracterizado por el oficio impecable, observación acuciosa de los especímenes, y prolijidad del resultado final; otras tendencias más recientes abordan la temática desde una representación más libre. A su vez, los destinos de dichas imágenes son amplios, y se extienden ya de sus fines científicos originales apareciendo como tendencia estética en la gráfica, indumentaria y ambientación de espacios interiores.
De alguna manera la ilustración naturalista nos conecta con nuestro entorno original, y está siendo rescatada y revisitada por una generación que necesita reencontrarse con su ambiente primitivo. Redescubriendo prácticas de antaño, estas imágenes nos ilusionan con un respiro del cemento y ajetreado ritmo moderno.
Nuevos Ilustradores en Chile
Próximamente, la galería Plop! exhibirá Naturaleza Ilustrada, muestra que reúne las obras de ilustradores chilenos cuya obra se basa en la representación de la flora y fauna.
Geraldine Mackinnon, Francisco Ramos, Antonia Reyes, Loreto Salinas, Elisa Monsalve y Andrea Lira son los creadores que participan de esta exposición con una veintena de trabajos que dan cuenta del importante momento que vive la ilustración botánica actualmente. Las obras estarán en venta y el público podrá asistir a visitas guiadas para conocer cómo se trabaja hoy esta disciplina que conjuga arte y ciencia.
La muestra se inaugura el 12 de Noviembre en Plop! Galería Merced 349 Nro. 7, Barrio Lastarria. Santiago – Chile
Ilustraciones y gráfica:
Antonia Reyes.
Imágenes, de izquierda a derecha en sentido de reloj:
Lámina Claudio Gay, abrigo de Stella McCartney, Gucci 2015, mural de Olaf Hajek, flamenco de Rodulfo Amando Philippi, loafers de Gucci, Revista I-D, lentes Gucci, —
Antonia Reyes
“Con un profundo interés por el mundo natural y el diseño, Antonia Reyes Montealegre trabaja como Ilustradora y Directora de Arte desde Santiago de Chile. Su trabajo se concentra en la ilustración naturalista, inspirada por el riquísimo patrimonio natural y biodiversidad de su país.”
Instagram: @antoniapajarito