Texto & fotos por: Paz Piña y Matías Pezoa @riolita.pigmento
Riolita es un proyecto que nace de la investigación y rescate del trabajo artesanal de la endémica Piedra Rosada de Pelequén, viendo en ésta una oportunidad de potenciar propiedades que se encontraban inexploradas.
A 122 km.al sur de Santiago de Chile se encuentra Pelequén, localidad que da lugar a la extracción y trabajo artesanal del pétreo de Riolita, o mejor conocido localmente como la piedra rosada de Pelequén. Este pétreo a través de la historia ha sido caracterizado por ser trabajado mediante la técnica del labrado, dando lugar a tipologías que se han mantenido intactas durante los años, siendo un reflejo de la actividad cultural de aquella comunidad.
Dentro del contexto territorial donde se encuentra este yacimiento, la concentración geológica de sus componentes producen una variante única que solo en aquel lugar en específico se hace presente, manifestándose principalmente a través de su color rosado. Estas mismas concentraciones de componentes químicos le otorgan la particular capacidad de compactarse con agua en un estado de pulverización, similar a los materiales utilizados en áreas como la cerámica, visualizando en esto una posibilidad de estudio que se había encontrado inexplorada.
En la actividad de trabajo, el labrado realizado por los artesanos genera un descarte en forma de pulverización que se asienta en todas las superficies del taller, convirtiéndose en una oportunidad de materia prima que optimiza un posterior proceso de producción.
Es así que reuniendo las potenciales cualidades químicas, más el estado de la materia prima y el característico tono rosado, nace una oportunidad de proyecto que se enmarcaría dentro de los parámetros sustentables.
Así nace Riolita, un set de pigmentos autoaglutinantes que explotan las cualidades químicas inexploradas de la piedra, que no posee excipientes tóxicos y desarrolla un producto sustentable monomaterial.
Su carácter sustentable se basa en la transformación y optimización de la materia prima, cuidando diversos factores ligados con su producción, traslado, o relación con el mismo usuario, colocando foco sobre tres parámetros: ambiental, económico y social. Constatando que la obtención del mismo no afecta la veta del yacimiento, dado que su origen viene a través de un descarte productivo, no contiene excipientes tóxicos formando un producto monomérico que optimiza la cadena productiva, y que este mismo disminuye los costos de fabricación.
Riolita es un pigmento que rescata un material único que se había mantenido estático, sacándolo de su contexto original para crear un elemento nuevo , que en suma de sus cualidades y al origen endémico del pétreo, fomenta el marketing territorial reconociéndose como un símbolo local.
Contacto
Matías Pezoa & Paz Piña
Estudiantes Diseño Industrial UDP
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@riolita.pigmento