Los paños de cocina son súper útiles, elementos de primera necesidad, de esos que sólo te das cuenta cuando tienes tu propia casa. En el cajón de mi cocina hay muchos, acá no se escatima en paños… a veces hay más de uno -incluso he llegado a ver cuatro-, dando vueltas por los mesones.

Por eso, cuando me topé con los paños de algodón de antaño (que se usaban antiguamente como pañales, ¿se acuerdan tatitas?), no dudé en comprarlos, porque además de ser súper resistentes secan de lo más bien. Venía un pack de tres, todos blancos, sin sentimiento, así que agarré un poco de pintura para tela, y en un abrir y cerrar de ojos, lo llené de color al más puro estilo confeti (o challas como decimos en Chile)

Materiales

– Paño de cocina
– Pintura para tela
– Lápiz con goma en la base
– Palo de helado o cuchara para mezclar

En mi caso decidí hacer los colores un poco más pasteles, así que mezclé la pintura con un poco de blanco.

Usa el lápiz por el lado de la goma a modo de timbre. Estira el paño y comienza a hacer los puntos.

Deja secar muy bien, y si es necesario plancha cuidadosamente por el reverso (dependerá de las instrucciones de la pintura que uses).Y eso es todo: más fácil, imposible

Y como siempre, mil gracias a La Petite Bakery por sus exquisitas galletas con forma de cupcake <3
¿Qué les pareció este proyecto?
Un abrazo y que tengan un lindo día!

Cony

“…soy Cony y creé este blog para compartir mis ideas con quienes aman el DIY y la decoración tanto como yo”
www.lavidaencraft.com