Por Daniela Salas @librosaciegas
La belleza de lo simple, de lo cotidiano; cuando de lo anodino brota un relato hermoso que de insípido no tiene nada; cuando ese contexto de lo que se espera como natural se quiebra y es cimiento para revolución e inspiración. En este mes en el que el blog está dedicado y enfocado a la belleza natural, como Libros a Ciegas quisimos destacar lecturas que recogen historias reales de personas que desde su trinchera generaron cambios o que registraron desde su visión de testigos y protagonistas, triunfos, miserias, hechos históricos, comunes, quizás no tan corrientes, que en el papel se convirtieron en magia.
Gentileza de @megustaleer
Una educación
En “Una educación”, Tara Westover relata su propia travesía; la de ser una niña americana, hija de un padre mormón fanático y fundamentalista, criada en los años noventa pero aislada de todos los avances tecnológicos y también del sistema educativo, para luego trasgredir la inercia de la vida que era esperada para ella y terminar doctorándose en Cambrigde. No es una típica historia de superación personal y final feliz; es también hacerse cargo de las heridas que todo periplo disruptivo lleva consigo; el ser a pesar de las inseguridades y abrazar esa vulnerabilidad. “Podéis llamarlo transformación. Metamorfosis. Falsedad. Traición. Yo lo llamo una educación”, dice Tara.
Gentileza de @megustaleer
Léxico Familiar
Nos basta con decir: ‘No hemos venido a Bérgamo a hacer campamento’ o ‘A qué apesta el ácido sulfhídrico?’, para volver a recuperar de pronto nuestra antigua relación y nuestra infancia y juventud, unidas indisolublemente a aquellas frases, a aquellas palabras. Una de aquellas frases o palabras nos haría reconocernos los unos a los otros en la oscuridad de una gruta o entre millones de personas. Esas frases son nuestro latín, el vocabulario de nuestros días pasados, son como jeroglíficos de los egipcios o de los asirio-babilonios: el testimonio de un núcleo vital que no existe, pero que sobrevive en sus textos, salvados de la furia de las aguas, de la corrosión del tiempo. Esas frases son las bases de nuestra unidad familiar, que subsistirá mientras permanezcamos en el mundo” . Una novela sobre la familia y las sutiles cuerdas que la mantienen unida, incluso cuando ya parece estar demasiado distanciada. “Léxico familiar”, de Natalia Ginzburg, es un relato autobiográfico que desvela una historia a través de esas conexiones cotidianas que se construyen solamente con la convivencia; ese idioma común e intimista que, aunque pasen los años y se alarguen los kilómetros entre unos y otros, son capaces de tirar con fuerza al lugar de origen.
Gentileza de @casadellibro
Prohibido nacer
“- Mi madre me quería tanto, que tuvo que tirarme de un coche en marcha para que huyera. – Mi padre me quería tanto, que cuando paseaba conmigo lo hacía por la vereda de enfrente, sin mirarme. – Mi padre era suizo, muy blanco. – Mi madre era xhosa, muy negra. – Y, según las leyes del apartheid, por ser de razas distintas tenían prohibido hacer el amor. – Pero al parecer lo hicieron… porque nací yo. – Lo peor que podía haber hecho”. Éste es parte del relato del comediante y animador de televisión sudafricano, Trevor Noah, titulado “Prohibido nacer”. Texto que reúne las memorias de la infancia del autor en plena época del apartheid. Historia desgarradora, potente y también hilarante.
Daniela Salas
Periodista de cuneta y lectora de salón, además de profesora de lenguaje. Vivió en Antofagasta, Nueva Zelanda y Madrid, por ahora en Santiago. Adicta a los libros y a todo lo vintage.