Texto e ilustraciones por: Sofía Muzard @dibujandonos

El Barrio Patronato es una de las zonas más multiculturales de Santiago. Situado entre las calles Bellavista, Buenos Aires, Río de Janeiro y Recoleta se encuentran entre otros, inmigrantes árabes, indios, chinos y peruanos. Venden sus productos que llenan de color cada rincón de sus enérgicas y transitadas calles.

Sin embargo no siempre ha sido así, este barrio fue el lugar donde vivieron indígenas que peleaban por no convertirse en esclavos, y españoles que se dedicaban a la artesanía. Esta zona era parte del sector conocido como La Chimba.

Hoy en día el panorama del barrio es el resultado de un sector comercial fundado por inmigrantes árabes que llegaron a fines del siglo XIX a vivir y trabajar hasta este lugar. Luego a mediados del siglo XX, el barrio fue compartido con comerciantes provenientes de China, Corea e India. Las primeras seis familias coreanas llegaron en la década del 70 al país, no sin antes haber pasado por otros países como Brasil, Paraguay o Bolivia y encontrando finalmente acá un clima más parecido al propio y un país que brindaba mayor seguridad. Por esto, y sumado a la crisis del dólar, que tenía a esta zona muy debilitada y con disponibilidad de negocios, es que a fines de esta época se produjo una inmigración importante de grupos provenientes de Corea, que venían con dinero para invertir, por lo que se instalaron rápidamente en este barrio mayorista de la ciudad.

Se dedicaron en un comienzo al negocio textil, en el que trabajaban para familias árabes. Luego al negocio de importaciones de productos traídos de su país, se sumaron los conocidos Supermercados Coreanos, hoy en día abarcan también el área inmobiliaria, la que se despliega con grandes construcciones verticales, dada la limitación de espacio que existe en la zona.

Al sumergimos en este Santiago antiguo y dirigirnos a éste icónico barrio, un lugar para ir a darse vueltas comprando, mirando y aprendiendo, entre grandes multitudes de gente, vendedores ambulantes y autos que con dificultad avanzan debido a los transeúntes, abundan las tiendas de vestuario, zapatos, juguetes y otros.

Caemos de golpe en el Supermercado Coreano, que se distingue a cuadras entre los latinoamericanos del sector principalmente por su gran cartel amarillo en la fachada de ladrillos. Al principio el lugar no llama mucho la atención y pareciera ser de paso, con una estadía de no más de 1 minuto, pero la simpatía del vendedor de rasgos característicos, hace querer quedarse unos minutos más observando el lugar.

 Los llamativos y desconocidos productos ofrecidos, nos envuelven en la curiosidad de conocer los exóticos artículos traídos desde el otro lado del mundo, nos preguntamos: ¿Qué comen allá? desde todo tipo de productos enlatados -pescados, carnes y legumbres- a snacks, gran variedad de dulces y bebidas, con singulares etiquetas y colores, que sólo los más osados estarán dispuestos a comprar y probar, debido a que su singular idioma, más que información nos aporta una gran cuota de intriga.

En algunos casos el envase es prácticamente el mismo que el que vemos en productos internacionales que también se venden en Chile, sólo cambia el idioma, pero en otros, nos encontramos con productos totalmente nuevos; arroz frito en todas las formas y colores, mezclado con salsa picante o chocolate, gran variedad de snacks, bastones largos, redondos, con forma de colmena o waffle, dulces con miel, cacahuates, pop de chocolate crocante, papas fritas y camote dulce. En el caso de las bebidas no es muy distinto, también existen variedades que no habíamos visto, las botellas tienen un “chupetín” como el de las mamaderas de los niños para tomarlo, de todos los colores, también hay latas de jugo que tienen generalmente la fotografía de un rostro en la parte delantera del envase.

La invitación es a iniciar esterecorrido, empaparse de una cultura distinta a la acostumbrada, sin tener que viajar, y sentirse extranjero en el propio país.

Datos

Dirección: Calle el Manzano 57, Recoleta.
Indicación: no está permitido sacar fotos así que ¡no lleves cámara y disfruta la experiencia!

Sofía Muzard
Estudiante de diseño gráfico UDD, artista innata, amante de Chile y sus rincones
Instagram: @dibujandonos
Mail: [email protected]