En un silencioso pasaje sin salida, en pleno barrio Guillermo Franke se encuentra esta acogedora casa construida en los años 40 que pertenece a un conjunto de viviendas de fachada continua con la identidad arquitectónica propia de este sector, la que conserva homogeneidad en el cuadrante formado entre calles Manuel Montt (oriente), Irarrázaval (sur), Infante (poniente) y Santa Isabel (norte). Al pasear por sus calles, es posible apreciar cómo las casas han mantenido mayoritariamente sus fachadas y rejas bajas, techos de teja y pisos de madera, estilo que ha sido respetado y mantenido por los cafés y negocios que durante los últimos años se han instalado en el lugar.  Los vecinos, por su parte, han defendido por años que se limite la construcción de edificios de altura. La plaza Guillermo Franke, ubicada a menos de dos cuadras, es el epicentro del barrio y los vecinos le dan vida con distintas actividades durante el año. En el sector además se encuentran agradables cafés, negocios y toda la oferta comercial y gastronómica de Av. Manuel Montt. 

La casa está remodelada en la gran mayoría de sus espacios y cuenta además con  un renovado sistema eléctrico y sanitario. 

El acceso está precedido por un pequeño antejardín que ayuda a dar privacidad en relación a la calle y desde la puerta principal se accede a través de un pasillo-recibidor a una mampara que dirige al área del living-comedor con cocina integrada. Este cómodo y agradable espacio tiene unos pequeños pero acogedores jardines en ambos costados, los que permiten el ingreso de mucha luz natural al interior de la casa. Ambos tienen terrazas de lindas baldosas y paisajismo con vegetación consolidada, y son perfectas para pasar las tardes o dejar abiertas para que el interior se enriquezca con su luz y naturaleza.

La altura libre del interior es cercana a los tres metros, el piso es un entablado de madera original, y sus ventanas han sido restauradas para recuperar los marcos de madera de raulí por ambos lados, que le dan a la casa un cálido carácter. 

La cocina fue renovada completamente por la reconocida oficina de arquitectura 57 studio, con un estandar altísimo, considerando el diseño de muebles de madera con cierre suave, iluminación directa en mesones, baldosas córdoba diseñadas por los propietarios, herrajes Blum, grifería y artefactos Franke. Se utilizó el espacio en donde antiguamente estaba  el dormitorio de servicio para ubicar el nicho donde se ubica el refrigerador y otros artefactos empotrados en una elegante distribución. La logia, adyacente a la cocina y cerrada por una puerta, funciona también como bodega y lavadero. El baño de visitas, que en realidad es completo, tiene iluminación natural y un diseño contemporáneo lleno de detalles. 

El dormitorio principal cuenta con un amplio y alto closet (que ocupa todo un muro desde piso a cielo) y tiene una ventana hacia el poniente, dirigida al antejardín cuya vegetación le da privacidad aislándolo de la calle (la calle es de todas maneras silenciosa y poco concurrida al tratarse de un pasaje sin salida). A su costado, está el baño principal que conserva los azulejos y artefactos originales. Al igual que el segundo dormitorio, tiene su ventana hacia el poniente y el antejardín. Un tercer dormitorio orienta su ventana hacia uno de los agradables patios interiores.

El estar en un conjunto con fachada continua y además tener protecciones en las ventanas, esta casa es extremadamente segura, ideal para quienes disfutan de las bondades de una casa pero no quieren preocuparse por su seguridad. 

Equipamiento: Calefacción central de caldera por radiadores.