Hace un tiempo hablaba en esta misma columna de la historia del enlozado y las maravillas que se pueden encontrar en los flea market de Alemania e Inglaterra, desde ese momento la pregunta sobre dónde adquirir estas piezas en Chile se ha vuelto reiterada.
El enlozado es un proceso de revestimiento que entrega alta resistencia a la pieza, no es pintura, no es barniz, es esmalte vitrificado fusionado sobre una base metálica.
Históricamente, los esmaltes fueron aplicados primero al oro, luego a la plata, cobre, bronce y posteriormente al hierro y al acero. Los objetos esmaltados más antiguos que se conocen fueron fabricados en la isla de Chipre, alrededor del siglo XIII a.C. por un artista desconocido que descubrió la posibilidad de fusionar el vidrio al metal, y así nació el arte del esmaltado vítreo o enlozado. Las primeras piezas para el hogar son de origen alemán y hoy están repartidas en mercadillos de antigüedades de todo el mundo. Es difícil pillar originales pero en Chile hubo una fuerte industria en los años 50, que permitió surtir varios hogares y también otro tipo de espacios como colegios, hospitales y comedores.
Los beneficios del enlozado son numerosos; el más importante es que impide la formación de óxido sobre la pieza tratada y soporta bien el calor, ya que el esmalte es totalmente ignífugo (no se quema) por lo tanto soporta llamas directas y se puede cocinar e incluso freír cualquier tipo de alimentos.
Tema aparte y favorito es la estabilidad de los colores que solo se logra con un auténtico enlozado. Los pigmentos aplicados en los enlozados antiguos dependían de la disponibilidad y el surtido cromático, generalmente en tonos pálidos: rosa, menta, celeste y amarillo.
Los ornamentos florales que decoran cacerolas, tazas y teteras también son de herencia germana e inglesa y ese gusto europeo de principio de siglo por re interpretar elementos de la naturaleza en objetos de uso cotidiano.
Fotos: La Tetera Enlozados & Coca Ruiz
En la búsqueda por aumentar mi colección, llegué por dato y recomendación a “La Tetera Enlozados” local 116 del Galpón 1, Victor Manuel de Barrio Franklin y me encontré con un despliegue maravilloso y diverso de enlozados antiguos, uno al lado del otro cuidadosamente organizados, formando una increíble recopilación, súper inspiradora que grita “llévame a mi”.
Un must have de la decoración nostálgica es conseguir la taza completamente enlozada en color negro. Yo me llevé la mía y esta semana es la protagonista de mi cocina.
Links:
Para instagram de “La Tetera Enlozados” @lateteraenlozados
Coca Ruiz
Diseñadora & Editora. Parisina de primera infancia, amante de la moda, la lectura y la decoración, especializada en dirección de arte y creación de contenidos, con buen ojo para detectar los detalles que nos inspiran diariamente.
instagram: @cocaruiz
