Entrevista a Camila Benavente: Dibujos de hogar.

Los dibujos de Camila Benavente son acogedores. Es que su principal objeto de ilustración son casas, que convierte a través de sus delgados trazos en hogares.

 Por eso quisimos entrevistarla para conocer más sobre ella: su historia, sus gustos e inspiraciones.

 Lo primero que hay que saber de Camila es que tiene 30 años, su segundo nombre es José, con el cual nombró a su pequeño hijo de cuatro años que es un mago. Vive en Santiago, en Providencia, específicamente en el Vaticano Chico.

Es la mayor de cuatro hermanas y creció en Santiago, pero también vivió en Ecuador y después en Concepción. Estuvo en un colegio francés donde aprendió el idioma y después volvió a Santiago para comenzar la universidad.

Llama la atención que no estudió ni diseño, ni ilustración, sino algo que dista mucho de lo que hace ahora: gastronomía en Inacap. Aunque trabajó como chef durante 6 años, no fue lo que esperaba, y decidió tomar otro rumbo.

 Al mismo tiempo trabajó, y aún lo hace, como profesora de francés. Lleva 8 años en eso, incluso hizo clases en un colegio por varios años. Y mientras se dedicaba a los idiomas empezó a dibujar en serio durante sus ratos libres.

 Pero desde pequeña siempre dibujó para superar el deficit atencional que hasta el día de hoy la acompaña. “El dibujo se volvió mi obsesión y tal como se puede ver en lo intrincados y maniáticos que son, aprendí a usarlos para concentrarme y entrar en un estado en el que verdaderamente todo lo que esta alrededor desaparece. Con música y un buen lapiz 0,1 puedo llegar a un nivel de concentración que ni el mejor Ritalin te lleva”, cuenta Camila.

¿Cuándo comenzaste a dibujar?

Aunque suene cursi, empecé a dibujar cuando estuve embarazada. Me vino la creatividad de una. Hice mis primeras pequeñas inversiones en materiales, lápices y papeles de buena calidad, mientras descubría librerías que me dejaban con taquicardia de la emoción, por todos los productos que tenían. De hecho, en la fila para pagar en la Librería Arquitectura es donde se me han ocurrido las mejores ideas para mis dibujos.

¿Cuál es tu inspiración?

Me gusta mucho el campo y desde chica he estado vinculada a él. Las casas coloniales, los caballos y también la arquitectura me inspiran. Extrañamente, tres parejas que he tenido han sido arquitectos, así que yo creo que de ahí también vienen las ideas. No me gustaría ser arquitecta, pero sí me gusta mucho dibujar casas.

Por eso la mayoría de tus dibujos son casas.

Las casas son lo mejor. Son el refugio del ser humano para escapar del mundo hostil. Suena fuerte, pero es cierto.  Yo creo que es muy importante tener un lugar donde escaparse del ruido, del smog y el estrés. Si no puedes vivir en una casa con patio, debes hacerte un jardín interior en tu departamento, lleno de plantas y flores.

 Por otro lado, amo dibujar los croquis de las casas de mis arquitectos favoritos. Deben de haber miles de croquis de casas de Le Corbusier que he hecho, pero me encanta la idea de rehacer un croquis y ponerle todos los detalles del jardín y que se vea el interior de la casa y ponerle algunos detalles escondidos.

¿Dibujas algunas otras cosas?

Me gustan también los invernaderos, y las plantas en general son mis favoritas por los detalles que tienen las hojas y lo bien que se ven en todos lados en un dibujo. Una planta nunca sobra.

Tus dibujos tienen trazos muy delgados, ¿eso es parte de tu personalidad al dibujar?

Me hice adicta al Rapidograph 0,1, un lápiz de tinta con la punta muy finita. En un principio, tenía que comprarme hartos, porque siempre se me rompía la punta. Ahora con la práctica puedo decir que me encanta ese lápiz y nunca uso lápiz mina previamente, ni siquiera en los bosquejos. Y sí, puede ser algo referente a mi personalidad: obsesiva y obstinada, como la Tauro que soy.

¿Qué buscas provocar con tus dibujos?

Me gusta que la gente se acerque y mire. Que encuentre al señor que está cortando el pasto en la esquina derecha de abajo del dibujo, o ese caballo comiendo trigo y rascándose una pata. Me gusta que primero se vea el total y después que el espectador pueda ir descubriendo detalles escondidos.

¿Cómo es tu ritmo de trabajo?

Tengo un taller en mi casa, donde pueden contactarme para ver mis trabajos y también me pueden mandar a hacer a pedido.  He hecho algunas cosas, además de casas, como retratos de novios y mascotas para partes de matrimonio.

¿En qué estás trabajando actualmente?

Estoy haciendo el diseño de un mural para la remodelación de un restaurant del Barrio Italia. También hago unas colaboraciones con La Casa de Juana, para ilustrar sus propiedades. Así como también, con una marca muy chora, que vende suculentas en maceteros de cerámica a los que les haré dibujos.

¿Has hecho exposiciones?

No aún, pero espero prontamente concretar una junto a una amiga que es seca. Juntas hemos participado ya en casi 10 ferias de ilustración desde el año pasado.

¿Qué consejos le darías a alguien que quiere dedicarse a las ilustraciones?

Nunca es tarde para lanzarse al mundo freelance de la ilustración, a mí me costó más de 5 años en atreverme. Tampoco es necesario ir a la universidad, uno puede hacer cursos y talleres de ilustración en paralelo al trabajo, por ejemplo yo estoy haciendo un curso de ilustración digital donde estoy aprendiendo sobre Photoshop e Illustrator que son programas indispensables para surgir.

Ilustraciones y foto: Camila Benavente.
Instagram: @quemchimama Mail: [email protected]